"Es como preguntarle a un pez sobre el mar, no sabe que existe", reflexiona Alfredo R. Cebrián, CEO y cofundador de Cuatroochenta, en Prueba de concepto, el documental sobre la trayectoria de Cuatroochenta que la compañía publicó a principios de año y que repasa en primera persona sus primeros diez años: “No nos damos cuenta de dónde estamos”. Y puede que sea cierto, sobre todo si tan solo hace diez años un equipo internacional, entonces solo lo formaban 12. O cómo una empresa que empezó como desarrolladora de aplicaciones móviles ahora es especialista en soluciones digitales cloud y ciberseguridad para mejorar el rendimiento de empresas e instituciones; con más de 10 millones personas usuarias de sus productos y servicios de software a través de 1.200 clientes en 21 países.
Y así se hace normal perder la perspectiva. También de cuál es el sentimiento del propio equipo y cómo conseguir mantenerlo cohesionado. Pero parece que este es el camino, porque según la encuesta anónima realizada por Great Place to Work® a las personas que trabajan en Cuatroochenta, el 91% "diría que este es un lugar excelente para trabajar". Resultados que han convertido a Cuatroochenta, por tercer año consecutivo, en una empresa Great Place to Work®.
El reto de extender la cultura corporativa en el modelo de trabajo híbrido
Si 2020 fue el año marcado por la pandemia y el teletrabajo, el gran reto de 2021 ha sido llevar la cultura corporativa de Cuatroochenta a un modelo de trabajo híbrido entre la presencialidad y el teletrabajo, con un equipo que ya suma más de 260 personas repartidas en sedes en España (Castelló -sede central-, Barcelona, València, Madrid y Burgos), Latinoamérica (Panamá, Bogotá y Santo Domingo) y, la más reciente, Estados Unidos (Raleigh-Durham). A lo que también hay que sumarle que la posibilidad de trabajar en remoto facilita que todas las personas empleadas de la compañía puedan hacerlo desde cualquier lugar, independientemente de las sedes (teniendo equipo en países como Alemania, Rumanía o incluso nómada por el mundo). Y no es el único condicionante. El carácter multidisciplinar del equipo también influye, con un 60% de la plantilla como desarrolladores/as, además de Business Analyst, Administración y Finanzas, Recursos Humanos y Comunicación y Marketing; y la edad, con una media de 35 años.
Entonces, ¿es posible llevar la cultura de empresa a todo el equipo? Los resultados de Great Place to Work® este 2021 demuestran que sí, con un incremento del porcentaje en todos los valores: credibilidad, respeto, imparcialidad, orgullo y camaradería.
Cuatroochenta también supera su Trust Index (nivel de satisfacción global) con un 88%; 2 puntos por encima de la encuesta del año anterior y 4 puntos por encima del índice de los Best Workplaces 2021 reconocidos en el ranking.
Escucha activa: transparencia y confianza
Una de las principales claves para conseguir que todo el equipo vaya en la misma dirección y sienta como suyo el ADN de Cuatroochenta ha sido la escucha activa y la transparencia. Porque que las acciones internas que lleve a cabo una empresa acaben teniendo un impacto positivo en el equipo solo es posible escuchando y conociendo sus intereses, motivaciones y necesidades. El objetivo: poder desarrollar acciones y planes que ayuden a su bienestar en la compañía.
«Damos por sentado que el equipo espera determinadas cosas por parte de la empresa, y no siempre acertamos. Es importante facilitar espacios para que la gente exprese lo que necesita y, a partir de ahí, actuar.»
La escucha activa y participación por parte del equipo ha ayudado a que este último año se lleven a cabo acciones como planes formativos adaptados al desarrollo profesional de cada uno/a y la incorporación al equipo de un Formador o el desarrollo de un Plan de Retribución Flexible, con seguro de salud y cheques restaurante, guardería, transporte y formación. También acciones que hacen más fácil el día a día y ayudan a conectar a las personas, como la optimización del entorno productivo y la digitalización de todos los procesos internos (entorno integrado, intranet, gestor de proyectos, portal del empleado/a, registro de jornada, seguridad interna, etc.). Beneficios que se suman a aquellos de los que ya disfrutaba todo el equipo, como la jornada flexible, que facilita la conciliación de la vida personal y laboral, la opción a teletrabajo, escala salarial con incrementos progresivos y la retribución variable.
"Una empresa transparente es una empresa fiable". Y si una empresa quiere ser fiable para sus clientes, es muy importante que también lo sea para el equipo que le da forma. Una transparencia que es necesario trabajar día a día haciéndoles partícipes de las decisiones y alimentando canales internos con los que poder hacer que la comunicación sea fluida, limpia y cercana (intranet, newsletter, formularios para conocer sus opiniones y preferencias, chat de comunicación interna, comunicados…). Sin olvidar una de las acciones más importantes que lleva a cabo Cuatroochenta dos veces al año: el estatus.
La confianza en la dirección
Uno de los puntos destacadas en los resultados ha sido la confianza en el equipo directivo de la compañía. Un 94% de las personas que han realizado la encuesta considera que la dirección "lleva el negocio honesta y éticamente; representan los valores que persigue la compañía y hacen lo que dicen que van a hacer".
Porque, al final, la razón del crecimiento de Cuatroochenta en estos últimos años ha sido hacer la tecnología útil y ponerla al servicio de las personas. La "tecnológica humanista que salió a bolsa", como destacaba El País.
Más allá del modelo híbrido de trabajo, de perfiles técnicos o no, de la edad o la descentralización; la clave para que una empresa sea un lugar en el que el 90% de la gente que trabaja en ella afirme que "quiero trabajar por aquí mucho tiempo" es tener un relato claro, congruente y que haga partícipe al equipo.