Ser capaces de saber qué nos está restando eficiencia e incluso aquello que no vemos y que nos está haciendo perder la batalla de la competitividad. Demasiado a menudo las inercias nos conducen por una única vía, nos impiden coger caminos alternativos. Por eso es bueno hacernos preguntas.
Profesores del Máster en Digital Development Management comparten con Cuatroochenta casos de éxito en los que la gestión de la transformación digital ha sido el detonante para avanzar hacia la revisión de las inercias que impedían a las respectivas empresas seguir mejorando.
El segundo caso que presentamos es del profesor David Gobert-Cézanne quien nos presenta un caso práctico procedente de Idearideas.
De la visión y agilidad de nuestro consultor en transformación digital, interno o externo, puede depender en gran parte el futuro de nuestra organización.
Punto de partida:
Idearideas es una agencia de creatividad, comunicación y marketing. Sus clientes provienen de los sectores de bienes industriales y de consumo. Además de confiar la creatividad en Idearideas, esperan que ésta realice para ellos la recopilación, estructuración, revisión y enriquecimiento de la información de sus productos. Procesos necesarios tanto para la producción como para el mantenimiento de aquellos soportes que requieren la información de productos, como por ejemplo la web corporativa, catálogos, etc.
Algo así se empieza casi por casualidad, para ayudar al cliente, y se convierte en un trabajo más, incluso en una oportunidad, aunque se aparte de tu life motive. Siendo así, no es de extrañar que todo comienza de una forma desestructurada. La empresa envía la información de forma discontínua, al ritmo que la va recopilando y se va guardando en carpetas de forma fragmentada.
Llega un momento en que compartes esas carpetas, que están organizadas por criterios como cliente, soporte o tipo de archivo. Por tanto, cada soporte supone un reto de recopilación de información con incontables errores. Los soportes están sometidos a un proceso continuo de revisión por parte tanto de Idearideas como de la propia empresa.
Manos a la obra:
El objetivo es unificar la recogida y gestión de los datos de marketing del producto (descripciones enriquecidas, etiquetas…), los archivos multimedia (imágenes, archivos en PDF, vídeos...), los datos técnicos (medidas, especificaciones…), de diseño e incluso de respuestas de usuarios (comentarios, calificaciones…), para que de una forma ágil y fácil se gestionen todos los canales de venta de los clientes para quienes se presta ese servicio.
Metodología:
Tras analizar los procesos que se están llevando a cabo, una primera aproximación a la solución hace ver que se requiere la incorporación de una solución tecnológica que se adapte a las necesidades. En este caso caso un Product Information Manager (PIM), paralelo al Enterprise Resource Planning (ERP). A través del PIM, se llevará a cabo una reconexión de canales digitales de los clientes a sus diferentes cuentas PIM.
Por otra parte, se estima la necesidad de contratar un Data Marshall, que tiene como función recopilar con precisión, integridad y calidad los datos del cliente. Pero también tiene control sobre la actividad general de la herramienta PIM. Además, se lleva a cabo formación interna y a clientes sobre el PIM y sobre los nuevos procesos que esta forma de trabajar conlleva.
La clave:
Tal y como sucedió en el caso descrito en ¿Te atreves a liderar un proceso de transformación digital en el sector logístico? se generó una fuerte reticencia inicial. Por una parte apareció el miedo a la obsolescencia de ciertos puestos de trabajo. Por otra, el cliente no entendía el cambio de planteamiento de un sistema que no era efectivo pero con el que se sentía cómodo.
Además, emergieron ciertas dificultades técnicas para el aprovechamiento correcto de la nueva tecnología en algunos de los canales, dificultades derivadas de una alta necesidad de especialización por parte de una empresa externa y su coordinación con el equipo interno. Un proceso complicado, que daba pie a aquellos con reticencias iniciales a ofrecer resistencia al cambio.
Resultados:
Mediante las soluciones planteadas se consigue pasar de un proceso global que presenta una gran cantidad de horas improductivas dedicadas a almacenar, recuperar y revisar información descontextualizada o aislada a una nueva forma de trabajar en la que la información se unifica. Se ha liberado capacidad productiva para centrarla en los aspectos de mayor valor percibido, relacionados con la creatividad. Por otra parte, se obtiene gran usabilidad y una alta conectividad.